UN PREMIO PARA EL ESFUERZO Y LA DEDICACIÓN

La Habana, Cuba.- En la mañana de este jueves, fueron entregados a un importante grupo de radialistas de todo el país, por su destacada labor en el medio, el Sello y el Micrófono de la Radio.

La ceremonia la encabezaron Guillermo Pavón Pacheco, vicepresidente del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT); Onelio Castillo Corderí, Director Nacional de Información y Propaganda de la Radio Cubana; Mirtha Casas, nieta de Luis Casas Romero; Rosalía Arnáez, presidenta de la sección de Radio de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), y Nereyda López, secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Cultura.

Para Vicky Estrada, una de las homenajeadas en el Ariguanabo, el rol de un asesor resulta fundamental dentro de una emisora. “Estamos detrás del micrófono. Gracias a nosotros la señal puede llegar a cada uno de los hogares del territorio”, apuntó Frank Acosta Castañeda, locutor de la voz de donde hay un río que también resultó distinguido.

Posteriormente se entregó el Micrófono de la Radio, máximo galardón que entrega el medio. En esta ocasión lo mereció entre otros el director de esta planta radial Jorge Luis Lazo Martínez quien expresó que es un inmenso placer recibir esta condecoración, la máxima que otorga la Radio Cubana a directivos, técnicos, artistas, y especialistas del medio en el país, más cuando este premio lo recibimos en saludo al 90 cumpleaños de nuestro querido e invencible Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz. La radio tiene la tarea de educar y sembrar valores, particular desempeño por el cual los realizadores ponen imagen y colores a la realidad, sin otro recurso que el sonido, ese que cautiva, emociona y queda en el recuerdo.

Luis Casas Romero creó una planta radial con programación continua, y más de nueve décadas después su semilla ha germinado desde las disímiles estaciones, hasta cultivarse la gran familia que hoy transmite el palpitar sonoro del mayor archipiélago del Caribe